Publicado en Heraldo de Aragón en Enero 2017
Hace exactamente diez años tres personas aragonesas a las que luego se unieron muchas más iniciamos una experiencia de Justicia Restaurativa en Aragón creando la Asociación ¿hablamos?, asociación para la mediación penal, penitenciaria y comunitaria de Aragón. Justicia Restaurativa es una evolución de nuestro sistema judicial, que avalado ya por la ONU, se extiende inexorablemente por toda Europa (varias directivas europeas así lo avalan). Fuimos, gracias a nuestro trabajo altruista y comprometido con la ciudadanía aragonesa, la tercera comunidad autónoma en España en desarrollar una experiencia pionera impulsada, en aquel entonces, año 2005, con el aval del Consejo General del Poder Judicial.
Nacimos para desarrollar la mediación penal entre víctimas e infractores de delitos convencidos como estamos que el diálogo es una vía que pacifica y aborda de lleno el conflicto social que todo delito supone, devolviendo el protagonismo a las personas para encontrar una solución reparadora para la víctima y responsable para el infractor. A lo largo de estos diez años hemos desarrollado cientos de mediaciones, penales primero, en Zaragoza, Calatayud y Huesca, y penitenciarias (entre personas presas) después, en las prisiones de Daroca y Zuera, así como algunas escolares en algunos centros educativos de Zaragoza.
Han pasado diez años. Diez. Exactamente diez años desde entonces. Entre medio hemos capacitado a cientos de jueces, secretarios judiciales y fiscales en España. Hemos participado en Jornadas de Justicia Restaurativa en los ayuntamientos de muchas ciudades españolas (Córdoba, Vitoria, Madrid, Sevilla,…). Hemos participado como formadores en Máster y Postgrado sobre Derecho Restaurativo de diversas universidades públicas y privadas (Bilbao, Zaragoza,…). Hemos participado como formadores del equipo de funcionarios públicos de prisiones en Argentina a demanda del gobierno de aquel país. Hemos realizado ponencias en el Congreso Europeo de Justicia Restaurativa. Hemos desarrollado cinco jornadas durante cinco años en la Facultad de Derecho de Zaragoza sobre Justicia Restaurativa y Sociedad Civil de la mano de la cátedra de Derecho Penal, con el objetivo de devolver lo aprendido en nuestra experiencia a la sociedad aragonesa en general y a los jóvenes universitarios en particular.
En materia de innovación hemos desarrollado y financiado el primer documental en España sobre Justicia Restaurativa y mediación penal, documental que hoy circula de manera gratuita por innumerables escuelas de negocio y universidades públicas y privada en España que desarrollan Máster de Justicia Restaurativa. Este documental se publicó en el año 2010, junto a nuestro libro “El valor de la palabra que nos humaniza. Cinco años de Justicia Restaurativa en Aragón”. Hemos capacitado a más de 1.000 policías locales en Zaragoza en 2016 en materia de mediación y hemos sido la primera asociación en España que ha capacitado en 2016 en temas de resolución alternativa de conflictos a un cuadro de mandos del Ejército de Tierra español con presencia en misiones de paz de la ONU. Y siempre, siempre, en todas y cada una de estas acciones hemos reivindicado nuestro origen aragonés. Innovaciones e investigaciones aragonesas al servicio de la sociedad aragonesa y española.
Pero todo esto, que siendo mucho, muchísimo, no vale de nada, si las cientos de personas con las que hemos compartido los procesos de mediación penal, penitenciaria, y escolar no hubieran apreciado el valor de la palabra que nos humaniza en esos procesos de mediación. Ellas son nuestro mejor aval. Sociedad que reconoce en el diálogo la fuerza interior para transformar, para transformarse, para dotar a nuestra sociedad de una nueva fuerza y protagonismo.
Ahora la directora general de administración de justicia del gobierno de Aragón, María Ángeles Júlvez, ha tenido a bien estimular el uso de la justicia restaurativa en nuestra comunidad, destinando decenas de miles de euros de dinero público en 2016 a la divulgación y fortalecimiento de la misma. Y lo hace, encomendando esa labor exclusivamente a los colegios profesionales, ninguneando toda esta experiencia de la Asociación ¿hablamos? en Aragón, en España, Europa y en Latinoamérica y alegando dificultades administrativas y burocráticas de asignación presupuestaria en las Cortes de Aragón. Nos sentimos dolidos, ninguneados, apartados, y no reconocidos. Son diez años de mucho sacrificio personal, familiar, económico, sin apoyo institucional ni económico, algo que nunca nos ha importado porque como asociación de ciudadanos libres, hemos trabajado siempre para el bien común de la sociedad haciendo aquello en lo que creemos y profesamos. No nos debemos pues al Gobierno, sino a la Sociedad. Pero nos duele, nos irrita, que llegado el momento de reconocer nuestro trabajo, se haga siempre de palabra y nunca con la acción.
Por eso, porque estamos hartos de esta forma de hacer política, hemos solicitado a los diversos partidos políticos con representación parlamentaria que incidan en la tramitación del presupuesto, para que dichas partidas dirigidas a la divulgación de la mediación en general, y de la penal en particular, se establezcan en un capítulo presupuestario que permita convocar un concurso basado en los principios de publicidad, mérito y capacidad para el destino de aquellas partidas, sin limitación al tejido asociativo. Esta sociedad se merece que quien transmita el mensaje restaurativo, mensaje que debe emanar de las entrañas de la sociedad, se haga bajo los principios de publicidad, mérito y capacidad.
Carlos Piñeyroa Sierra.
Presidente de la Asociación ¿hablamos? para la mediación penal, penitenciaria y comunitaria en Aragón. http://asociacionhablamos.es/