Vivir lo inesperado. Bienvenido/as
Vivir lo inesperado. Olvidar la seguridad de lo cotidiano. Sentirnos capaces, incluso en la fragilidad y la vulnerabilidad. Recibir lo inesperado como un don, como un regalo, porque seguro, seguro, que nos hace crecer. Salir de las comodidades. Aprender. Sentir la necesidad de aprender. Y saber que no lo haces solo, que aprender siempre es en …